viernes, junio 30, 2006

Próxima parada II


Un nuevo posible destino para las vacaciones: Santorini (Grecia) . ¿Qué opinais?

miércoles, junio 28, 2006

Praga II

Praga no es un sitio caro, se puede comer sin problemas en cualquier sitio. Sólo hay que saber un poco de inglés, ya que los ingredientes en las cartas de los restaurantes aparecen en inglés. Si no, un pequeño diccionario de bolsillo es suficiente.
La comida local está bien, más o menos usan los mismos ingredientes que en España pero preparados de foma distinta. Si no te quieres arriesgar, puedes recurrir a McDonalds, Pizza Hut, ect., pero sería una pena porque la cocina checa está buena.

Un tema aparte lo merecen las bebidas, en concreto el agua: no conocen el agua mineral sin gas.
En el avión nos dieron una botellita de agua de una marca checa con el tapón verde, tenía bastante gas, y no nos gustó. Así que cuando fuimos a comprar agua para nosotros, probamos a coger de la misma marca con el tapón rojo (no quisimos cambiar de marca porque las etiquetas en checo no son nuestro fuerte). Y tan contentos que nos fuimos. Al día siguiente, nos fuimos a ver el Vysehrad. Estaba lloviendo, y para mi desgracia, el chubasquero calaba. Después de una hora visitando el lugar quise beber agua, así que, ni corta ni perezosa me ateché y cogí la botella de litro y medio que habíamos comprado. Abrí la botella y... me duché. Se me quedó una cara.... El agua tenía gas, el suficiente para llevarme puesta media botella.
Los refrescos tienen bastante más gas que aquí, pero si no quereis sorpresas como la que os acabo de contar, es lo más recomendable, junto con los zumos. Además tienen sabores distintos a los españoles: recuerdo una botella de 1/2 litro de Fanta de color verde que estaba muy buena, era de limón, pero no tan dulce como el de aquí, sabía mucho más a limón.
La bebida nacional es la cerveza, dicen que es muy buena (lo siento, a mí no me gusta, así que no puedo opinar).
Más aventuras con las botellas de Fanta en próximas entradas.

martes, junio 27, 2006

Próxima parada...

Túnez.
He visto algunas ofertas de agencias, pero aún no me he puesto a buscar digamos en serio.
¿Algún consejo, sitios recomendables...? Se admite toda la información que me podáis proporcionar.

lunes, junio 26, 2006

El monasterio budista

Cuando me apunté a la excursión por los Pirineos, en diciembre de 2004, sabía que iba a ver nieve, y que iba a pasar mucho frío. Pero nunca me imaginé que acabaría entre monjes tibetanos.
Esa mañana me dijeron que íbamos a ver un monasterio cerca de Panillo (Huesca). Ingenua de mí, pensé que sería un monasterio más, como los que hay por toda España, sólo que con unas vistas espectaculares. Había una espesa niebla que no permitía ver más de un par de metros por delante del coche, y cuando tomamos aquella curva tan repentinamente (aún me duele el golpe contra la ventanilla) apenas pude ver el cartel. ¿¿Un monasterio budista?? ¿¿¿¿En mitad de los Pirineos???? ¿Nos habían abducido los marcianos y habíamos aparecido de repente en Nepal y yo ni me había enterado, o qué??

La niebla contribuía a la sensación de haber viajado milles de kilómetros en unos momentos. Pero no, en mitad de las montañas, en pleno Pirineo oscense hay un monasterio budista. No me lo podía creer.
Aparcamos cerca de una furgoneta hippie (de los años 60, lo juro, con pintadas y todo) y subimos a ver el monasterio.
Se compone de tres edificios en un amplio terreno: en la explanada está el monasterio donde viven los monjes y donde tienen la sala de oración.
En la puerta tenían un montón de calzado de la gente que estaba orando dentro. Hacia la mitad de la explanada estaba la tienda (no saben nada los monjes...) donde vendían pulseritas, incienso, abanicos (¡¡en pleno mes de diciembre!!), piedras varias, libritos de oración, cintas con cánticos....
Al fondo de la explanada, unas escaleras que subían hacia un pequeño templo, un jardindito y el huerto. El templo era muy original, muy colorido, con el suelo de cemento cubierto apenas por pequeñas alfombras y sin calefacción, ni un triste brasero; para entrar había que descalzarse (¡qué manía!), así que miramos desde la puerta, ¡¡ni loca me quito yo las botas a 3 grados bajo cero para pisar el suelo congelado!! A derecha deltemplo hay una especie de invernadero, y a la izquierda, el huerto, lleno de banderas con oraciones.

Pero la "vuelta a la civilización" aún me reservada otra sorpesa: no muy lejos de allí, está Torreciudad, un pueblo del Opus Dei. Juro que no me cachondeo de nadie, aquí tenéis la prueba: http://www.torreciudad.org

Algunas direcciones de interés sobre el monasterio
http://www.dagshangkagyu.com/
http://www.caiaragon.com/es/actividades/index.asp?idAct=186&idSeccion=6&idTipo=78
http://www.aragonesasi.com/monaster/panillo.htm

jueves, junio 22, 2006

Praga I

Hace un par de veranos estuve en Centroeuropa con unos amigos maños, chico y chica. Siempre que vamos a algún lado tenemos un montón de anécdotas, no sé cómo nos las apañamos.
Y cómo no, la primera, en la frente: habíamos quedado en Madrid para coger el avión a Praga, y a ellos ya les pidió el DNI la policía secreta en la estación de autobuses. En Barajas, la guardia civil incautó al mañico el tenedor que llevaba en la mochila, no fuera a pinchar a alguien en el avión ¡!; curiosamente, con la cuchara no hubo problemas, a pesar de que era metálica. Vale, pinchos no tiene, pero sigue pudiendo usarse como arma.

Una vez en Praga, nos dedicamos a recorrer la ciudad. Es preciosa, paseamos durante horas visitando algunos de esos lugares: la plaza del Ayuntamiento, con su reloj y sus casas pintadas, siempre llena de gente; el Vysehrad; el puente de Carlos, y al otro lado del río Moldava, el Hrad, allí en lo alto.

Como medios de transporte tienes metro y tranvía, muy típico. Hay líneas de tranvía por toda la ciudad. Si coges el metro, tica siempre los billetes, porque aunque no es obligatorio hacerlo para subirse, suele haber seguratas que, como te vean una mínima pinta de turista (léase mochila, cámara de fotos o de video) o hablando en otro idioma, a por tí que van para comprobar si ticaste el billete. Aviso que la multa es bastante gorda. Nosotros estábamos avisados (gracias, Paloma ;-P) y nos salvamos, porque nos pidieron en un sólo día 3 veces los billetes.

Una cosa que nos llamó la atención, fue que casi no había gente mayor por las calles, ningún abuelete sentado en un banco al sol, o sacando los nietos a pasear. Pero enseguida descubrimos el porqué: ¡¡¡los atropellan en los semáforos!!! Es imposible cruzar de acera a acera si no te pegas una carrerita, así que los pobres abuelos, o se quedan encerrados en casa, o salen a jugarse la vida, y todo por ir a dar un pequeño paseito...

martes, junio 20, 2006

Comenzamos....

a ver que tal sale el experimento.
Este blog está dedicado a los viajes, tanto lo que he hecho como los que me gustaría hacer.